A medida que la sangre pasa a través de los riñones, algunos de los constituyentes del plasma son removidos y excretados en la orina.
De este modo la sangre resulta "depurada" de determinados solutos en el proceso de formación de orina.
Fuente: Fisiología humana/ Stuart Ira Fox, 12va edición. Editorial Mc Graw Hill, pp. 591-592.